Si bien el empresario y comunicador guatemalteco Dionisio Gutiérrez tiene más de cuarenta años de exposición pública y trayectoria cívica, poco o casi nada se conoce de su vida familiar.
Su esposa, Ana de Gutiérrez, colabora en distintas áreas de proyección social, junto con el presidente de Fundación Libertad y Desarrollo, Dionisio Gutiérrez. Sobre su labor en la fundación, Ana ha expresado: “Me siento muy privilegiada de acompañar a este gran equipo que hace posibles tantas cosas y siento que mi aporte principal es estar al lado de él acompañándolo y apoyándolo”.
Sobre sus reflexiones a propósito de los retos y desafíos que hemos vivido como humanidad en los últimos años, Ana señaló: “La parte del ser humano que más me inspira es holística, es la parte mental, del cuerpo y del corazón con la que quisiera trabajar más y conocer de dónde venimos, de dónde vamos y cómo podemos ayudar. Coincidir en este universo en este momento al mismo tiempo, es una coincidencia gigante. Reto, optimismo y esperanza de que como humanidad vamos a salir adelante y ser más empáticos sin depender de los gobiernos y quién nos venga a salvar sino autorescatarnos nosotros mismos”.
Finalmente, sobre cómo manejan las diferencias de opiniones y criterios, la señora de Gutiérrez explicó: “Siempre, los debates empiezan en casa, antes de salir en algún programa o algo yo doy mi punto de vista. Y nos respetamos”.
A lo que Dionisio replicó: “Para mí Ana ha sido una excelente coach de debates, las cámaras no es un ambiente que ella le guste estar pero le gusta mucho debatir”.
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Dionisio Gutiérrez 